Cristina Casas es uno de los “jóvenes exponentes” del judo andaluz. Cuando le preguntamos a esta joven malagueña de diecisiete años por su entrenador, primero apunta a Juanma Prados –“mi entrenador desde pequeña”– y luego a Paco Rodríguez –“me aporta mucho, sobre todo con su forma de sentir el judo”– y a Diego García. Este año viaja a la Fase Final junior a defender el título logrado en 2008, y aunque llega con muchas ganas, es prudente, sabedora de que hay que ir combate a combate “como si fueran una final”.


Echando la vista atrás, en lo deportivo ¿cómo evaluarías el pasado 2008?
Primero pensé que se me venía grande la situación pero para mí fue una gran oportunidad el entrenar y competir con las dos selecciones a la vez (cadete y junior) e ir a dos europeos en un año. Me veía con posibilidades en cadete por el papel que hacía en las internacionales, pero en Berlín cadete la rusa campeona me luxó el codo rompiéndome el ligamento interno casi entero y fue mi primera gran lesión que me impidió hacer el de España cadete y además marcó el resto de la temporada…pero estoy contenta porque creo que di mi máximo en las competiciones.
¿Con qué objetivo viajas al campeonato de España?
Mi objetivo es el mismo en todas las competiciones, darlo todo en cada combate que haga como si fuese una final y ver hasta dónde me lleva.
Físicamente, ¿cómo llegas a la cita?
Sin esparadrapos ni coderas que cubran mi codo, como nuevo y totalmente curado.
¿Y anímicamente? Me siento con muchas ganas de evaluarme compitiendo y también me siento contenta porque independientemente del campeonato sé que estoy trabajando duro y creciendo como judoka
¿Cuáles son tus objetivos para este 2009?
Mi primer objetivo es superarme a mi misma, como competidora y como persona. Yo quiero pisar el mundial y hay que apuntar lo más alto posible por si no llego al menos caer en el tatami más alto, pero ya veremos hasta dónde podemos llegar, de momento solo pienso en el día a día, mirar para atrás o hacia delante solo me distrae del presente, hacer el presente lo mejor posible me llevará lo más alto que pueda.
El judo internacional se nutre, cada vez más de judokas muy jóvenes. ¿Cómo ves tu transición como deportista junior a senior? ¿y en general en el judo español?
En el paso de junior a senior hay mucha diferencia, por eso está la categoría sub23, es duro puntuar y sacar resultados entre las seniors siendo juniors. Yo creo que siendo mi primer año de junior aún tengo que ver lejos puntuar en el absoluto. Cuando pase el tiempo y me sienta más preparada y pesada (ríe) empezaré a pensar en cómo hacerme un hueco entre las fuertes de 48.
¿Cómo ves las modificaciones en el reglamento de competición que se están aplicando en este 2009?
La verdad es que no me hacen gracia. Queda muy antiestético ver a dos entrenadores dejándose la garganta detrás de una valla por dar las instrucciones a los competidores que como de costumbre están esperando oírlas. También me duele que se acaben las “agarra-patas” aunque a los judokas del este les dolerá aún más (ríe).

Muchas gracias Cristina.
Gracias a vosotros.

Entrevista de Osotogabi


 
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